Tras la lectura de los dos primeros capítulos del libro “Les TIC a l’Educació infantil” de Jordi Cases y de M. Roser Torrescasana, me gustaría comentar brevemente algunos aspectos del mismo.
El primer capítulo de este libro, “Les TIC i l’escola”, nos habla de que la sociedad ha vivido y vive un gran cambio debido a la influencia de la revolución digital, y de que, si la sociedad cambia todos los hombres deben hacerlo para adaptarse a la misma. Nos explica también que ya que los alumnos de la actualidad son miembros activos de esa sociedad insertos ya en el mundo de la tecnología, debe la escuela adaptarse a ellos y realizar importantes cambios en su estructura y en sus recursos.
Personalmente, no discrepo en absoluto con este punto.
A continuación, nos encontramos con el segundo capítulo, que se centra en las “Aportacions de les TIC a l’educació infantil”.
En él, sus autores nos dicen que debemos ofrecer a los alumnos los estímulos apropiados para su momento madurativo, y, por tanto, también debemos regular los estímulos tecnológicos que les aportamos. Después, se dedica a hacer un recuento de todos los puntos positivos que tiene para los niños la inserción de los avances tecnológicos en sus vidas, ya que les ayuda a desarrollar multitud de áreas. Más tarde, hace una especie de PCC figurativo en el que representa cómo involucraría las nuevas tecnologías en sus secciones, “Descoberta d’un mateix”, “Descoberta de l’entorn natural” y “Intercomunicació i llenguatge”.
Tras esto hace una reflexión sobre el papel del maestro en el mundo de las Nuevas Tecnologías. Nos dice que el maestro debe utilizar todos los recursos que le sean útiles para lograr que sus alumnos consigan sus objetivos; y para ellos debe dominar esos medios y a la vez tener presentes los conocimientos previos sobre los mismos que tienen su alumnos, ya que suelen ser más de los que esperamos. De algún modo, el maestro, que deberá modificar su metodología, poco a poco se convertirá en un enseñante de métodos de aprendizaje más que de conceptos.
Por último, nos habla de que, para que el uso de las nuevas Tecnologías en los centros sea exitoso, es necesario un trabajo en equipo por parte de los maestros, dando y recibiendo apoyo, interesándose y buscando nuevos materiales, renovándose continuamente y manteniendo una organización apropiada.
Este capítulo ha supuesto un problema para mí, porque no me ha aportado prácticamente nada que no supiese pero me ha hecho reflexionar. En lugar de aclararme las ideas ha desaclarado lo que tenía claro. Siempre estuve de acuerdo con la inserción de las Nuevas Tecnologías en el aula, ya que me parecen una fuente estupenda de desarrollo y que ya no es ajena a la vida de los alumnos, pero... si realmente las Nuevas Tecnologías tienen un papel ahora mismo en la vida cotidiana de nuestros alumnos... , ¿por qué la escuela se debe centrar en desarrollar más ese aspecto en lugar de aportarles lo que no reciben en sus casas?
Este año he hecho el practicum dos, y, por fin en contacto con niños, he observado que tienen serios problemas para hacer tareas básicas como son escribir a mano o restar. Si estos alumnos se encuentran en esa situación machacando esas áreas casi de continuo, ¿qué sería de ellas si les quitamos tiempo para trabajarlas y se lo dedicamos a algo que se conocen como la palma de su mano? Estoy de acuerdo en utilizar la tecnología como un recurso didáctico más, pero... ¿tan esencial es que recurramos a ella siempre que haya oportunidad? Ese “enigma” es algo a lo que me gustaría que me contestase esta asignatura.
El primer capítulo de este libro, “Les TIC i l’escola”, nos habla de que la sociedad ha vivido y vive un gran cambio debido a la influencia de la revolución digital, y de que, si la sociedad cambia todos los hombres deben hacerlo para adaptarse a la misma. Nos explica también que ya que los alumnos de la actualidad son miembros activos de esa sociedad insertos ya en el mundo de la tecnología, debe la escuela adaptarse a ellos y realizar importantes cambios en su estructura y en sus recursos.
Personalmente, no discrepo en absoluto con este punto.
A continuación, nos encontramos con el segundo capítulo, que se centra en las “Aportacions de les TIC a l’educació infantil”.
En él, sus autores nos dicen que debemos ofrecer a los alumnos los estímulos apropiados para su momento madurativo, y, por tanto, también debemos regular los estímulos tecnológicos que les aportamos. Después, se dedica a hacer un recuento de todos los puntos positivos que tiene para los niños la inserción de los avances tecnológicos en sus vidas, ya que les ayuda a desarrollar multitud de áreas. Más tarde, hace una especie de PCC figurativo en el que representa cómo involucraría las nuevas tecnologías en sus secciones, “Descoberta d’un mateix”, “Descoberta de l’entorn natural” y “Intercomunicació i llenguatge”.
Tras esto hace una reflexión sobre el papel del maestro en el mundo de las Nuevas Tecnologías. Nos dice que el maestro debe utilizar todos los recursos que le sean útiles para lograr que sus alumnos consigan sus objetivos; y para ellos debe dominar esos medios y a la vez tener presentes los conocimientos previos sobre los mismos que tienen su alumnos, ya que suelen ser más de los que esperamos. De algún modo, el maestro, que deberá modificar su metodología, poco a poco se convertirá en un enseñante de métodos de aprendizaje más que de conceptos.
Por último, nos habla de que, para que el uso de las nuevas Tecnologías en los centros sea exitoso, es necesario un trabajo en equipo por parte de los maestros, dando y recibiendo apoyo, interesándose y buscando nuevos materiales, renovándose continuamente y manteniendo una organización apropiada.
Este capítulo ha supuesto un problema para mí, porque no me ha aportado prácticamente nada que no supiese pero me ha hecho reflexionar. En lugar de aclararme las ideas ha desaclarado lo que tenía claro. Siempre estuve de acuerdo con la inserción de las Nuevas Tecnologías en el aula, ya que me parecen una fuente estupenda de desarrollo y que ya no es ajena a la vida de los alumnos, pero... si realmente las Nuevas Tecnologías tienen un papel ahora mismo en la vida cotidiana de nuestros alumnos... , ¿por qué la escuela se debe centrar en desarrollar más ese aspecto en lugar de aportarles lo que no reciben en sus casas?
Este año he hecho el practicum dos, y, por fin en contacto con niños, he observado que tienen serios problemas para hacer tareas básicas como son escribir a mano o restar. Si estos alumnos se encuentran en esa situación machacando esas áreas casi de continuo, ¿qué sería de ellas si les quitamos tiempo para trabajarlas y se lo dedicamos a algo que se conocen como la palma de su mano? Estoy de acuerdo en utilizar la tecnología como un recurso didáctico más, pero... ¿tan esencial es que recurramos a ella siempre que haya oportunidad? Ese “enigma” es algo a lo que me gustaría que me contestase esta asignatura.
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